A día de hoy, si fuera seleccionadora de perfiles profesionales, todos los buscaría con capacidad creativa. Y es que la creatividad no es una habilidad reservada exclusivamente para los artistas como músicos, poetas, escultores, pintores, actores, etc.; ni para los profesionales del mundo gráfico, publicidad o marketing. La creatividad se ha elevado como una característica muy necesaria (y demandada) en gran parte de los puestos de trabajo.